Fué una visita muy entretenida aunque un poco "pesadilla"por la cantidad de información que el guia nos quería transmitir ,pero en conjunto bien.
También visitamos en Telefónica la exposición de Julio Verne,mas relajada y muy amena y la tercera visita mucho mas divertida y bastante " provechosa" fue a la calle Postas a disfrutar del típico bocadillo de calamares y rematamos con un café en la Mallorquina ( Puerta del Sol ) en resumen una bonita y divertida salida.