Una nueva salida, en esta ocasión el Grupo recorrió el entorno del Arroyo de la Pelaya , pasando una mañana divertida en compañía de buenos amigos, las fotos de nuestros fotógrafos Begoña, Juanma y Miguel Ángel Santiago , junto con la crónica de nuestro querido amigo Isaac dan buena muestra de ello.
a.astorga
ARROYO DE LA PELAYA (17–MARZO-2023)
En una mañana con temperatura ideal para caminar y con un cielo encapotado, que pronto despejaría, comenzábamos una ruta circular que transcurriendo por el noroeste del municipio de Torrejón de Ardoz y por la parte sur del municipio de Paracuellos del Jarama, nos conduciría a las inmediaciones del Arroyo de la Pelaya.
Tomamos el camino hacia Paracuellos, que abandonamos para dirigirnos al barranco del arroyo, donde existió, aunque no se sepa dónde, la fuente de La Pelaya con una agua delicadísima y suave, como se recoge en el Espejo Cristalino de las Aguas de España, publicado en 1697:
“Fuente Pelaya. En la Villa de Paracuellos en tierra de Madrid ay muy excelentes fuentes, y entre ellas, y todas las de la comarca es señaladísima por muy excelente la fuente que llaman de la Pelaya dista de Paracuellos como media legua entre el medio día, y poniente de hybierno es de aguas delicadísimas, y de gran suavidad”
. Bajamos el barranco, teniendo a nuestra derecha el arroyo y dejando a nuestra izquierda el pico de “Las Zorras”, donde se encuentra el conocido como bunker de Paracuellos, construido en 1918 debido a que esta zona fue utilizada como de maniobras militares, pues España se encontraba entonces inmersa en la Guerra del Rif, también llamada segunda guerra de Marruecos.
Tras cruzar una parte del Pinar de los Berrocales, iniciamos el regreso por el camino que transcurre, en su inicio, paralelo a la margen izquierda del río Jarama y rodeando la urbanización de los Berrocales del Jarama, urbanización que partir del año 1970 y en régimen de cooperativa, pusieron en marcha un grupo de jóvenes ingenieros aeronáuticos que trabajaban en el INTA (Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial). El camino de los almendros, ya en flor, nos devolvió a Torrejón.
Una jornada más los entornos del Arroyo de la Pelaya, con escasa agua y al que le faltan las fuerzas para tratar de llegar desesperadamente al río Jarama, nos permitieron de forma sosegada y tranquila, continuar disfrutando del senderismo y del contacto con la Naturaleza …
Isaac
Fue una ruta de medio día, pero nos dimos una buena caminata. Qué bonitos los almendros en flor y las vistas de Madrid con un cielo de nubes espectacular. Un abrazo para todos.
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